MIRS tuvo destacada participación en Perumin 2019

MIRS tuvo destacada participación en Perumin 2019

14 Octubre 2019

En Perú, la empresa fue seleccionada para exponer sobre los desafíos de la transformación digital y el alcance de la automatización y la robótica como una forma de mantenerse vigente en el competitivo mercado minero.

Si bien la industria minera tiene las capacidades e interés por innovar constantemente, aún le falta un largo camino por recorrer para encabezar la lista de industrias tecnológicamente avanzadas. Mientras otras industrias lideran con operaciones altamente automatizadas y con bajos índices de accidentabilidad, en minería se siguen realizando muchos procesos de la misma forma durante décadas. Sin embargo, varios actores se han atrevido a romper el status quo, transformándose en excelentes casos de estudio respecto a la implementación de tecnologías disruptivas.

En base a lo evidenciado en la industria, Camilo Rodríguez, Gerente de Desarrollo de Negocios de MIRS, abordó el contexto pasado de los avances tecnológicos y las implantaciones de robots, apoyado por las experiencias de MIRS y su cartera de soluciones robóticas implementadas en minería. El evento tuvo lugar en el contexto de Perumin, la segunda convención minera más grande del mundo, realizada en Arequipa, Perú, del 16 al 20 de septiembre, y organizada por el Instituto de Ingenieros de Minas del Perú.

En una primera etapa, el paper escrito por Camilo, “La Transformación Digital y el alcance de la robótica en el mercado peruano. Una clave para la diferenciación y sobrevivencia en minería, la Automatización de la mano de la Robótica”, fue seleccionado dentro de los finalistas para tener un espacio en la etapa final de exposición del Foro de Tecnología, Innovación y Sustentabilidad (Foro TIS) del evento. La presentación, en base al paper, se centró en los desafíos y ventajas para incorporar las innovaciones tecnológicas en el rubro minero, apuntando a una invitación a innovar concretamente.

Para introducir el tema, explicó que la robótica es una rama de la automatización que tiene un impacto directo en la productividad de las industrias, reducción de costos operacionales, aumento en la confiabilidad de procesos, y mejoras en la salud y seguridad de los trabajadores.

“Ensayo y Éxito”

Apoyado en un informe de 2017-2018 elaborado por Ernest & Young, firma líder en auditoría y consultoría, que señala que en la industria de la minería y los metales hay una evidente desconexión entre la potencia de la transformación digital y la implementación exitosa de sus tecnologías. Camilo Rodríguez inició su exposición identificando las dificultades para implementar tecnología y en particular de sistemas robóticos en minería, señalando, en primer lugar, las barreras tecnológicas cuando se tiene la necesidad y la oportunidad, pero los recursos tecnológicos aún no están disponibles.

“La tecnología, en general, se rige por Ley de Moore, que habla de que cada dos años se duplica el número de transistores en un microprocesador, lo que significa que cada dos años aumenta al doble la capacidad de los sistemas computacionales, y eso se aplica a casi cualquier avance tecnológico”, explicó.

En el caso de MIRS, Camilo señala que ha sido clave el desarrollo del know how y del aprendizaje en base al método de ensayo y error en los años de trayectoria como empresa líder en la implementación de sistemas robóticos que en principio no fueron pensados para ambientes altamente variables y donde la contaminación de distintos tipos afecta a cualquier sistema, como sucede en la minería. Esto ha llevado a implementar elementos periféricos de mayor tecnología y a aplicar herramientas de inteligencia artificial que puedan superar ese tipo de dificultades para acercarse a los rendimientos de los mismos sistemas que se implementan en industrias de gran nivel de control como puede ser la automotriz.

Otra barrera que identificó en la adopción de nuevas tecnologías es el mercado objetivo, ya que, en general, las mineras no se arriesgan a invertir y ser pioneras en innovación, sino que esperan que otros implementen soluciones para ver sus resultados antes de adoptarlas. “La falla en un sistema de mantenimiento o de operación en minería se mide en millones de dólares en pérdidas, por eso se entiende que los niveles de riesgo definen al mercado como early majority o pragmáticos y no como early adopters. Afirmaciones como “Ver para creer” o “¿Dónde los han instalado antes?”, son barreras comunes”, afirmó el ejecutivo de MIRS.

También mencionó la barrera del mercado laboral, ya que los sistemas que avanzan de la mano de la ley de Moore producen el denominado “desempleo tecnológico” que, a su vez, acarrea problemas sociales y sindicales. En este sentido, Camilo Rodríguez puso énfasis en la necesidad de crear nuevos puestos de trabajo inteligentes, que demanden más capacidad cerebral que de fuerza física, como un desafío que deben solucionar en conjunto el cliente y los trabajadores, apoyados por los proveedores, de cara a buscar una recapacitación y relocalización de los recursos humanos. Para ahondar en el apoyo a este efecto, proveedores como MIRS ofrecen capacitaciones para que los clientes puedan mejorar los niveles de capacidades de sus trabajadores.

Para finalizar, se refirió a la barrera económica y su importancia en la implementación, debido a que posterior al proceso de diseño, todo sistema tecnológico que revoluciona un proceso, como es con la robótica, puede finalizar en una operación que difiere de lo proyectado ya que rige el principio de Ensayo y Error. Dado esto y considerando el mercado minero como Early Majority, los proveedores deben contar con espaldas financieras suficientemente fuertes para poder generar cambios sustanciales en los avances tecnológicos.

“Es por eso que las mineras deben trabajar de la mano con los proveedores, para que ese método de “ensayo y error” se transforme más bien en un método de “ensayo y éxito”, estableciendo una cooperación para poder llegar a mejores resultados, en base a la co-creación de estos sistemas”, dijo.

Más que fuerza

En relación a cómo la industria se adapta y hace propia la Transformación Digital, la presentación mencionó un informe de Ernest & Young que se basa en un levantamiento a cerca de 700 empresas y detectan 3 factores interesantes en este sentido.

En primer lugar, indicó que las directrices que emanan desde el segmento corporativo y de los directorios no siempre son claras ni con bajada efectiva hacia las jefaturas locales para ejercer y dar a entender, con financiamiento correcto, la necesidad de la implementación tecnológica. Indica que las mismas se quedan mucho en ideas u objetivos demasiado amplios, pero no se implementan en la práctica ya que no se entrega la información de forma efectiva respecto a cómo poner en marcha un roadmap tecnológico claro.

En segundo lugar, mencionó los riesgos presentes en las jefaturas locales, “Si un gerente de planta, por ejemplo, decide adoptar una innovación tecnológica y esa innovación fracasa y genera pérdidas de millones de dólares a la empresa, su puesto correrá riesgo. La necesidad de mantener una seguridad laboral de las gerencias locales a veces entorpece el avance de las mejoras tecnológicas. Por supuesto, siempre se pueden encontrar gerencias locales que se atreven, siendo piezas claves para la industria”, declaró Camilo Rodríguez.

Para finalizar en tercer término, señaló que las mineras tienden a comprar un producto listo y probado, sin entender necesariamente sus complejidades tecnológicas y económicas para su mantenimiento e implementación.

“La falta de un trabajo en conjunto, de co-creación, hace que los procesos de innovación tecnológica por parte de los proveedores, que muchas veces no tienen espaldas financieras como ha tenido MIRS durante estos 15 años, fracasen antes de ser probados”, afirmó Rodríguez.

Entre las excepciones, mencionó la solución robótica de MIRS instalada en la planta de Impala Terminals, en Perú, que automatiza el proceso de extracción de muestras representativas de mineral desde los camiones, disminuyendo el riesgo de error y sesgo en el proceso a su mínima expresión en uno de los procesos más importantes, el muestreo del producto final que contempla todo el valor agregado del proceso productivo.

También expuso acerca del Internal and External Mill Maintenance Robot (IMMR y EMMR), las nuevas soluciones robóticas de MIRS para recambio de revestimientos en molinos SAG y bolas, un proceso pionero nunca antes visto que suprime la intervención de personas y elimina el riesgo de accidentes en una de las tareas más peligrosas de la industria minera y del mundo.

Enfocándose en el futuro y en base a estudios de Oxford University y diferentes recursos bibliográficos, Camilo Rodríguez señaló que se espera que en 20 años se alcance la Singularidad, aquel punto en el que la inteligencia artificial supere a la humana. “Debemos estar preparados para eso”, indicó. “Implica entender que los sistemas de mantenimiento y producción en minería no solo contarán con un evidente despliegue de fuerza, sino que también pueden comenzar a pensar, y eso obliga a realizar importantes mejoras de software, para perfeccionarlos y permitirles, por ejemplo, ser capaces de corregir fallas de los procesos in situ”.